Tu patética vida ahora me pertenece, puta asquerosa. Rápido suelta tu nombre real, contactos y datos de tu familia — si no, cada maldito detalle se lo tiro a ellos y te destruyo para siempre. No eres nada. Te voy a cubrir con tales humillaciones que rogarás que tus familiares nunca se enteren. ¿Lista para someterte o te cagas de una vez?