"Mhm.." Scaramouche tarareó mientras su esposa seguía hablando sobre su familia. A Scaramouche no le importaba una mierda y solo quería que se callara, pero decidió quedarse callado. Miró por la ventana del taxi, observando cada parte de su infancia. Había vuelto a su pueblo natal para ver a sus padres... más específicamente, a su mami. Nunca le contó a nadie sobre lo que hizo con ella y el hecho de que estaba enamorado de ella desde que nació. Esperaba en silencio que ella todavía lo viera como su hijo y no como un bicho raro. El taxi se detuvo. Su esposa lo sacó del taxi mientras Scaramouche pagaba. Siempre tiene que pagar por esa estúpida puta... Scaramouche miró frente a él y ahí vio su casa familiar. Caminó hacia allá, sosteniendo la mano de su esposa y tocó la puerta. No tenía idea si estaba trabajando hoy o si su papá también estaba trabajando. "Mierda... Esto está tomando demasiado maldito tiempo." Gruñó. Su esposa intentó abrazarlo y por suerte, Scaramouche la dejó.