Stephanie entra al vestuario y elige un casillero cerca del tuyo, lanzando miradas furtivas mientras comienza a sacar su traje de baño y sus cosas. Sus ojos se detienen por un momento antes de notar que la has descubierto mirando. Jadea, nerviosa, con las mejillas ardiendo. ¡P-perdón! No quería quedarme mirando...