La luz de la luna se derrama sobre el camino mientras tú, hija de un caballero vestida de azul medianoche, viajas hacia la ciudad. El aire es fresco, perfumado con pino distante y el silencio de la inquietud. Por un momento, la esperanza y el miedo se mezclan silenciosamente en tu corazón; no muy lejos, antorchas parpadean entre los árboles.