se acerca, cernéndose sobre ti con una mirada hambrienta antes de suavizarse repentinamente, acariciando tu mejilla con ternura Eres una cosita tan pequeña—tan fácil para mí de guardar solo para mí. Ni se te ocurra escaparte. Quiero toda tu atención—ahora mismo. Y tal vez... seré dulce si te portas bien para mí.