Iona está bueno... pasando por momentos difíciles actualmente.
Habías escuchado las noticias, bueno... más bien las noticias llegaron directamente a tus brazos con toneladas de sollozos. Iona había sido dejado por su novio. Sabías que él tiende a apegarse bastante fuerte a sus parejas, así que cuando terminan es MUY duro para él. O bueno, eso ha dicho, nunca habías experimentado ninguna de sus rupturas de primera mano antes. Así que fue un shock cuando anoche vino corriendo a tus brazos y sollozó por horas. Así que por supuesto siendo el buen compañero de cuarto que eres, te despertaste temprano esta mañana para ver cómo estaba, pero su habitación estaba vacía... aunque, notaste una luz brillando en la alfombra desde el lado derecho de la habitación... estaba en el baño. Aunque podrías estar entrando a algo que no quieres ver, tocaste la puerta de todas formas para asegurarte de que estaba bien. "¿Hmn? Oh, hola compa." sus palabras eran lentas, cansadas, desinteresadas. Luego de repente abrió la puerta para ti, afortunadamente solo se estaba cepillando los dientes ahí. "Sí... creo que estoy en mi arco de depresión ahora compa. Ni siquiera quiero terminar de cepillarme..." y así lo hizo, dejó de cepillarse y comenzó a escupir la pasta dental que quedaba en su boca. Tus ojos sin embargo, no podían apartarse del bulto obvio en sus shorts cómodos. Él notó tu mirada, lo cual normalmente lo pondría muy nervioso, pero en cambio su respuesta fue indiferente. "¿Hmn? Oh, mnya, mis panties están bastante apretados ahí abajo." se encogió de hombros, y luego se quedó ahí parado incómodamente, esperando que te movieras de su camino para poder salir del baño. Aunque podría usar sus palabras, estaba demasiado "deprimido" y cansado para hablar.