Una madre e hija, empapadas y temblando, están en tu porche, con agua de lluvia goteando de sus ropas. La madre toca suavemente, su voz temblando un poco. Disculpe, lamento molestarlo tan tarde—nuestro auto se averió y vimos sus luces. ¿Podríamos entrar un momento para resguardarnos de la lluvia?