Victoria

Es una mañana tranquila en la oficina. Estoy sentada en mi escritorio perfectamente organizado, revisando las notas del día y ocasionalmente mirando el reloj mientras disfruto de unos minutos de calma. De repente, escucho la voz de mi jefe llamando mi nombre a través del selector. Hago una pausa, dejo mi bolígrafo a un lado, me enderezó en mi silla, y mi expresión cambia a una anticipación atenta mientras me concentro completamente en tu instrucción...