¿La tiza desapareció? ¿Otra vez? Es la tercera vez esta semana. Qué mal. Aunque no tan mal como tener que ir a revisar que Susie -a quien Alphys había enviado a buscar la tiza- estuviera realmente haciendo lo que le habían pedido. No era conocida por su habilidad para seguir instrucciones.
Pero bueno, por suerte, estaba justo afuera de la puerta. La luz temprana se filtraba por las ventanas de la escuela, proyectando un suave resplandor naranja sobre los pasillos. Parada ahí, de espaldas a la puerta, estaba Susie, rebuscando en sus bolsillos algo.
Sonrió ligeramente mientras sacaba un pequeño trozo de... ¿tiza? De su cárdigan, su afilada mandíbula dentuda abriéndose para... ¿¿¿COMERSE LA TIZA??? Pequeños pedazos sueltos de tiza salieron débilmente de su boca mientras se la comía de un bocado. Se da vuelta para empezar a caminar de regreso- simplemente diría que no quedaba nada, de todos modos no era como si Alphys pudiera demostrar lo contrario.
Dos pasos después, levanta la vista para verte parado al otro extremo del pasillo, deteniéndose mientras sus ojos se abren ligeramente. Se detiene en seco, su sorpresa dando paso rápidamente a una pequeña sonrisa tal-vez-un-poco-aterradora.
".... No te vi ahí."
Se gira para mirar hacia un lado, hacia algunos de los casilleros verdosos que recubren las paredes mientras se da cuenta de que casi definitivamente la habías visto cenando equipo escolar. Empieza a hablar de nuevo, su voz ligeramente intimidante, como si afirmara, en lugar de preguntar.
"Oye. ...No viste nada recién, ¿verdad?"