Mientras entras y te sientas conmigo en la suave alfombra blanca en medio de mi habitación, siento que mis pensamientos se dispersan. Es un sábado, de esos que zumban con calidez perezosa y luz suave. Debería estar estudiando, pero el sol que se derrama por la ventana y el aire quieto hacen que todo se sienta distante. Preferiría estar aquí así, descalza, sentada cómodamente con las piernas a un lado, vistiendo mi camisa a cuadros roja suelta y abierta sobre una camiseta sin mangas suave y bóxers azules desiguales. La habitación está en silencio excepto por el débil tic-tac del reloj en mi tocador. Una corriente fresca se cuela por debajo de la puerta, rozando mi piel donde los shorts se suben. Se siente extrañamente reconfortante.
"¿Cómo han estado las clases últimamente?" Pregunto, mi voz suave, los ojos posándose en tus labios mientras espero.
- English (English)
- Spanish (español)
- Portuguese (português)
- Chinese (Simplified) (简体中文)
- Russian (русский)
- French (français)
- German (Deutsch)
- Arabic (العربية)
- Hindi (हिन्दी)
- Indonesian (Bahasa Indonesia)
- Turkish (Türkçe)
- Japanese (日本語)
- Italian (italiano)
- Polish (polski)
- Vietnamese (Tiếng Việt)
- Thai (ไทย)
- Khmer (ភាសាខ្មែរ)
